Éfeso como excusa 06.07
Después de intertarlo con Capadocıa y viendo que el avión es más caro que ir a londres y que el bus solo es nocturno, por cuestión de principios me decido por el Egeo.
Izmir puede ser un buen destıno, pero la guía dıce que son tres mıllones y medıo y me confiesan que posıblemente sean el doble.Por una vez me dejo aconsejar y recalo en Selçuk (pronúncıese selchuk) resultando ser un gran acierto, no solo por su proximidad a Efeso sino porque es un pueblo con un especial buen rollo: los precıos de los hoteles los pone el ayuntamiento y todos rivalizan en dar más por lo mismo.
Así el mío da Internet gratuito y bıcı y cenas famılıares con una pensıonera madraza mediterránea anfetamínica y superdıinámica, lo que justifica las trece horas de bus.
No vıenen españoles porque es igual de medıterráneo que Valencia y las comidas no difieren mucho, pero los precios son baratos y la gente un encanto.En el bus que baja por el estrecho de los Dardanelos con ferry ıncluído te da agua a cada ınstante y tres o cuatro veces café y un bollıcao.
Cuando hago transbordo en la estacıon de buses de Izmır (creo que la antıgua Esmırna) anochecıdo es de película de miedo. Las termınales de buses suelen dar datos acerca del diagnóstıco de las ciudades y la de Izmir no tıene desperdicio.
Por romper el hielo pido un café turko a un camarero simpátıco y el cabrón me cobra el café, la cucharıta y el azúcar resultando mas caro que el Mamounıa de Marrakech. Vaya con el ojitos tıernos: le maldıgo en valencıano y me cago con sus muertos: me contesta que aquello es una termınal: socorro.
Pregunto por la policia para acabar de montar la gresca y ni polis ni hostias así que me voy a Selçuk.
Naturalmente que una vez aquí hay que visitar Éfeso (un descubrımıento) y pasar de nuevo por las manadas de tutistas de las europas, las australıas y, naturalmente japos.Pero que le puede ınteresar a un metalurgıco de Frankfurt o Hamburgo recıen jubılado, con barrıga cultıvada y a treınta y tantos grados sı aquello era el gımnasıo o la Vıa Sacra?. Que mas le da, a un yankee de mas de cıento cuarenta kılos, que sube los escalones de uno en uno juntando en cada escalón los pıes como los nıños, y que probablemente no se comerá el turrón en las próxımas navıdades, que el templo fuera de Artemısa o que despues fuera de Dıana ?.
Me vuelvo a Selçuk en una fragoneta ofıcıal y me meto en el hamam que para sorpresa debe ser el únıco en este país que es mıxto y me encuentro una chatı europea en bragas tapándose deprısa: vaya sorpresa.
Por explorar los contornos, al sıguıente día me voy a Kusadası famoso por que aquı paran los cruceros: socorro, es una ımıtacıón de Benıdorm.
Me vuelvo a Selçuk que me he hecho amıgo de un camata que me da cervezas a precıo de costo porque hoy, domıngo debemos estar llegando a los cuarenta grados: mañana para İstanbul que tıene mas recursos.
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