Muerte en Venezia con guerras 03.03
Al igual que en Muerte en Venecia, la peste ha salido y nadie sabe como ha sido:
pongo la tv del hotel y me voy enterando por CNN y un canal que tienen los
franceses en francés para Asia.Se ve como desinfectan aviones o ponen a la peña en cuarentena.Como en Muerte en Venecia, las autoridades locales no dicen nada.Los chinos dicen que tienen muchos casos porque los están
buscando, pero a estas alturas los cuentos chinos no se los cree nadie y a
mi me quedan veinte días y Air France dice que nones que no me cambia el
billete.Como en Muerte en Venecia me iré al lago (aquí, en Hanoi no hay playa tampoco), después de pasar por la peluquería (todavía quedan algunas en las
aceras) y miraré un mancebo como se difumina en el infinito a los acordes de Malher o me cantaré una de Sabina para pasar el tiempo. Ahora hace frío (esto es el norte y parece que tienen cuatro estaciones como nosotros), y me vienen a la cabeza diversas opciones:
a. me quedo,
b. me voy a Camboya, c. me voy a Laos, d, me marco una de visa y regreso perdiendo billete, e. me busco un restaurante muy caro y me lo pienso mientras hago el gourmet, f. me voy al bingo (aquí no hay).Naturalmente elijo la opción e. y por cuatro euros me pongo del revés, vuelvo al hotel.Mientras vosotros oís la mascletá de San José, aquí, que es de noche y los
irakíes del hotel gritan por teléfono todo el rato y le increpan al chaval del hotel diciendo que su fax no llega, me meto en la habitación y los irakíes tienen la tele a todo gas y gritan y gritan toda la noche. Esta mañana, mientras abandono el hotel (no estoy para fiestas) mis amigos irakies se han puesto todos el traje, han cogido las carteras de los negosis, han pedido un taxi y le han dicho que al banco. Los empleados del hotel dicen que después de Irak será Korea (aquí se escribe con k) y que iguel después vienen aquí otra vez.Un anciano de los pocos que quedan asegura que no, que aquí no vuelven.
Me conecto en internet y hace una hora que han comenzado las bombas.Tenía razón Teresa cuando aseguraba que en cuanto terminaran de arder las fallas empezaría Bagdad.Pues eso, mientras dormíais después de la cremá ha comenzado la otra
cremá.
pongo la tv del hotel y me voy enterando por CNN y un canal que tienen los
franceses en francés para Asia.Se ve como desinfectan aviones o ponen a la peña en cuarentena.Como en Muerte en Venecia, las autoridades locales no dicen nada.Los chinos dicen que tienen muchos casos porque los están
buscando, pero a estas alturas los cuentos chinos no se los cree nadie y a
mi me quedan veinte días y Air France dice que nones que no me cambia el
billete.Como en Muerte en Venecia me iré al lago (aquí, en Hanoi no hay playa tampoco), después de pasar por la peluquería (todavía quedan algunas en las
aceras) y miraré un mancebo como se difumina en el infinito a los acordes de Malher o me cantaré una de Sabina para pasar el tiempo. Ahora hace frío (esto es el norte y parece que tienen cuatro estaciones como nosotros), y me vienen a la cabeza diversas opciones:
a. me quedo,
b. me voy a Camboya, c. me voy a Laos, d, me marco una de visa y regreso perdiendo billete, e. me busco un restaurante muy caro y me lo pienso mientras hago el gourmet, f. me voy al bingo (aquí no hay).Naturalmente elijo la opción e. y por cuatro euros me pongo del revés, vuelvo al hotel.Mientras vosotros oís la mascletá de San José, aquí, que es de noche y los
irakíes del hotel gritan por teléfono todo el rato y le increpan al chaval del hotel diciendo que su fax no llega, me meto en la habitación y los irakíes tienen la tele a todo gas y gritan y gritan toda la noche. Esta mañana, mientras abandono el hotel (no estoy para fiestas) mis amigos irakies se han puesto todos el traje, han cogido las carteras de los negosis, han pedido un taxi y le han dicho que al banco. Los empleados del hotel dicen que después de Irak será Korea (aquí se escribe con k) y que iguel después vienen aquí otra vez.Un anciano de los pocos que quedan asegura que no, que aquí no vuelven.
Me conecto en internet y hace una hora que han comenzado las bombas.Tenía razón Teresa cuando aseguraba que en cuanto terminaran de arder las fallas empezaría Bagdad.Pues eso, mientras dormíais después de la cremá ha comenzado la otra
cremá.
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